Fabricación de bateas, una tradición en pueblos de Sonora

La fabricación de bateas es una tradición para Natanael Andrade Martínez y su familia asentada en un municipio de la Sierra de Sonora, que además se ha convertido en su principal sustento económico.

A los 16 años de edad, el originario de Moctezuma, Sonora, aprendió a fabricar estos recipientes de madera observando a su abuelo y actualmente las fabrica para su venta junto a su hermano Blaz Esteban, además de su tío Vicente Martínez Moreno y su primo Vicente Martínez Gómez.

Comentó que antes tardaba cerca de cuatro días para elaborar una batea y las herramientas que utilizaban eran rústicas, por lo que el aspecto del artículo también lo era y eso ha cambiado con el tiempo.

Explicó que “hasta con hacha se tumbaban los árboles, con la chazuela las hacían y las pulían con vidrio, una botella de vidrio la quebraban y con eso detallaban”.

Ahora, explicó, el proceso es diferente porque se utiliza motosierra para cortar el árbol, además de que se cuidan los detalles de los lados y el fondo de la batea.

El joven, de 35 años de edad, mencionó que espera encontrar mejores oportunidades para que esta actividad económica crezca como negocio y trascienda el estado de Sonora, así como obtener apoyos que le permitan reforestar su pueblo. 

“Buscar apoyo también para reforestar, de hecho, mi papá lo hace; buscar la manera de reforestar nuestro pueblo -que falta bastante-, para apoyar con los árboles, de aquí estamos sacando esto, la naturaleza nos da pues hay que regresarle un poco”, expuso. 

La madera que se utiliza para la producción de las bateas es del árbol conocido como chino que es muy parecido al mezquite, pero se caracteriza por tener madera de mejor aspecto y más blanda, explicó.  

Detalló que la mayor parte de la venta se realiza directamente en Moctezuma, pero hay personas que viajan de otros lugares del país y de Estados Unidos para adquirir esta artesanía.

El valor de una batea, precisó, varía de 650 hasta mil 800 pesos, dependiendo del tamaño y diseño de la misma. 

Relató que le sorprendió una persona que le contactó por Facebook a raíz de una publicación personal, le consultó sobre la distancia entre Nogales y Moctezuma con el fin de adquirir la artesanía. 

“Ya le dije que estaba retirado y me dijo —mañana en la mañana voy para Agua Prieta y ya tú me vas guiando— y se vino desde Nogales, Agua Prieta y se vino hasta acá, vino a comprar exclusivamente la batea y dije: ¡A la torre!”, detalló.

Las personas interesadas en adquirir una batea o alguna de las figuras de madera que fabrica pueden contactarle al 634 108 1467

LA HISTORIA

Todo inició cuando el tío abuelo de Natanael, Pedro García†, originario de Nácori Chico, le enseño a fabricar bateas a Pedro Martínez y dos personas más, Ignacio Terán “El Picacho” y a Pacheco Bujanda.

Relató que los tres elaboraban la cazuela con hacha y la pulían con vidrio y después la descendencia de su abuelo, Pedro García, siguió con esa tradición.

“Ahora, detrás de mi viene mi hermano, mi primo que también está aprendiendo a hacer y mi hijo, tengo un niño de cuatro años que a veces se viene conmigo ahí a estar lijando. Es muy bonita la tradición y me gustaría que también aprendiera, no como forma de vida, si no como una tradición”, concluyó.