Recomiendan escuchar y creer a menores que sufren violencia escolar

*Especialista en sicología infantil recomienda no minimizar el hecho y creer en los hijos que enfrentan esa situación
*Lo primero es ayudar a las y los menores a entender lo que es un acoso escolar y cómo se puede enfrentar según su dinámica familiar

Escuchar, respetar, creer y no minimizar el hecho, son elementos clave para ayudar a una menor que vive una situación de ciberacoso o violencia escolar, señaló la especialista en sicología infantil, Guadalupe Saucedo Acuña.

Este 4 de noviembre es el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso en la Escuela, incluido el ciberacoso.

Comentó que tras venir de un confinamiento por la pandemia por coronavirus, los menores estuvieron protegidos de cierta manera en la ambiente familiar y al reintegrarse de forma presencial pudieran tener mayor sensibilidad a situaciones que no puedan manejar al estar frente a compañeros que no conocen en persona y al enfrentarse a inseguridades personales.

De presentarse situaciones de violencia o acoso en el aula, dijo, la solución dependerá de la forma en que el docente maneje la situación, sin embargo, desde casa se pueden brindar las herramientas para que los menores estén mejor preparados.

“Primero que nada es ayudar a los niños a entender lo que es un acoso escolar, explicar lo que es, cómo se puede enfrentar según su dinámica familiar, además de mantener abiertas las líneas de comunicación entre padres e hijos”, expuso.

Asimismo, señaló, se debe incentivar a los menores a hacer lo que aman, lo que ellos quieren y necesiten hacer de una manera ordenada y propia.

Refirió que también es necesario dar el ejemplo de cómo tratar a otros con amabilidad y respeto, pues hay que recordar que la manera en como los hijos se comportan es el ejemplo que se da dentro de casa.

En el caso de ciberacoso, agregó, las niñas, niños o adolescentes reciben mensajes inapropiados y agresiones por WhatsApp, Facebook o página web y en ocasiones los padres de familia no lo notan.

De ahí la importancia, refirió, de involucrarse, ver cómo se expresan sus hijos, si su comportamiento cambia, si hay falta de apetito o se muestra retraído.

Hizo el llamado a padres de familia brindar confianza a niños, niñas y adolescentes, escuchar, respetar y creer que algo está sucediendo, además de ser empáticos para resolver juntos cualquier situación que se presente.