Los delincuentes que se dedican a la extorsión telefónica han cambiado de objetivo y ahora contactan a jóvenes, ahora se hacen pasar por investigadores sobre grupos criminales y señalan a la víctima que su línea ha sido clonada.
El comandante del grupo de Extorsiones Telefónicas y Secuestros de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), Adrián Noriega Olivarría, explicó que los extorsionadores consiguen que la persona acuda al centro comercial más cercano.
El objetivo de eso es que la víctima se encuentre con una supuesta abogada y no le permiten colgar, en el trayecto piden información personal y familiar, por lo que se comunican con personas de su familia simulando un secuestro y pidiendo dinero por el rescate, señaló.
El investigador de la AMIC destacó que son hábiles para manejar las emociones de los involucrados en la farsa, incluso llegan a pedir fotografías de la persona semidesnuda y, una vez recibidas, sirven para ejercer mayor presión sobre los familiares.
“Al momento de recibir esas imágenes entran en crisis emocional muy fuerte”, por lo que es necesario extremar precauciones.
Las indagatorias sobre ese tipo de ilícitos, anotó, demuestran que los delincuentes eligieron a su presa a través de las redes sociales o llamadas telefónicas recibidas previamente por cualquier integrante de ese círculo familiar que proporcionó datos.
Noriega Olivarría destacó que los agresores saben cómo actuar, utilizan la estrategia del miedo y los momentos de crisis para obtener dinero, que es su principal objetivo.
La forma de evitar caer en este tipo de delitos es:
Hermosillo, Sonora, México
Tel.: +52 1 662 217 3771
Añada su comentario: