Docentes del ITH emprenden proyecto para salvar abejas

*Desarrollan un proyecto de aplicación de nuevas tecnologías para diseñar colmenas inteligentes
*Con eso se contribuirá a reducir la mortalidad de las abejas por temperaturas extremas de Sonora

Docentes del Instituto Tecnológico de Hermosillo desarrollan un proyecto de aplicación de nuevas tecnologías para diseñar colmenas inteligentes que contribuyan a reducir la mortandad de las abejas, derivada de las temperaturas extremas que son comunes en el estado de Sonora.

El investigador Oscar Mario Rodríguez Elías, miembro del equipo de investigación en este proyecto, informó que se ha trabajado con la Unión Ganadera Regional de Sonora, y con miémbros de la Asociación de Apicultores de Hermosillo, con el propósito de analizar y proponer aplicaciones de tecnología que mejoren las condiciones de vida de dichos insectos, considerados en la actualidad los más importantes del planeta.

Consideró que “la polinización que realizan las abejas para la realización de múltiples cultivos con los cuales nos alimentamos nosotros  y se alimenta el ganado es sumamente importante;  sin embargo, hemos visto  en últimos años una reducción muy significativa en la producción de abejas, eso tiene que ver con múltiples motivos, como el cambio climático y el uso de pesticidas” 

Informó que desde este año se inició con el proyecto y se esperan resultados en 2023. Se refirió al uso de las nuevas tecnologías, dentro de la llamada industria 4.0, área en la que ha enfocado su trabajo en el cuérpo académico de Tecnologías de Software de la Industria 4.0, en el doctorado en ciencias de la ingeniería, maestría en ciencias de la computación y las carreras de Ingeniería en sistemas computaciones e Ingeniería informática.

Actualmente las tecnologías de software se utilizan para apoyar en la solución de problemas  tanto en ámbitos sociales como productivos , son las que están comenzando a revolucionar por cuarta vez la industria, por eso el nombre de 4.0. De fondo tiene mucho que ver con la integración de las ciencias de la computación y particularmente con inteligencia artificial  en el desarrollo de nuevos productos, servicios  y automatización de procesos, la robótica, la integración del internet de las cosas, la impresión 3D, cómputo en la nube, realidad aumentada, entre otras tecnologías que convergen en esto que se conoce como industria 4.0.

Los profesores participantes son: Xóchitl García Cruz y José Luis Molina de ingeniería mecatrónica y Rafael Galaz Bustamante de la licenciatura y maestría en electrónica  “estuvimos haciendo acercamientos con la asociación ganadera local, donde ellos nos plantearon  que debido a las condiciones tan cambiantes del clima aquí en el estado es una situación muy difícil para los apicultores  en términos de mantener las poblaciones de abejas de aquí de la entidad, porque tanto en épocas de frio como de altas temperaturas les impacta, pues provoca una mortandad de abejas muy significativa”.

Es una industria muy significativa para el estado, y la miel de Sonora es clasificada como una de las de mejor calidad en el mundo. Por ello se buscan hacer esfuerzos que contribuyan a  reducir la mortandad de abejas. 

El proyecto es ver cómo se puede aprovechar la tecnología para ayudar a los apicultores a tratar de reducir la mortandad de las abejas, se trabajó este año con alumnos de licenciatura de ingeniería mecatrónica, inicialmente para  hacer una simulación de cómo se comportan las temperaturas al interior de los panales.

Lo anterior ofreció una idea de los flujos de aire y de ciertos datos que se están comenzando a tomar para un estudiante en maestría en electrónica y una estudiante de maestría en ciencias de la computación a fin de desarrollar un sistema para monitorear las condiciones al interior de las colmenas, y usar esos datos para tratar de predecir comportamientos del entorno.

La idea es analizar “cómo podemos comenzar a desarrollar tecnología para ayudar a controlar la temperatura al interior de las colmenas con el objetivo de que a dos o tres años más se pueda estar pensando en el diseño de colmenas inteligentes  con el uso de tecnologías, con el uso de nuevos materiales que puedan ayudar a reducir la mortandad de estos insectos tan benignos para la población en general”.

Se esta desarrollando una aplicación móvil que esperamos esté disponible el próximo semestre y un sistema de sensores. La aplicación móvil va a estar recuperando la información de estos sensores porque las colmenas están en lugares donde no hay conectividad de internet o de acceso a energía eléctrica. Se tiene que trabajar en ver cómo mejorar las condiciones  del uso de energía de los sensores para que puedan estar funcionando durante más tiempo, y usar los celulares para recopilar los datos, y en el momento que se pueda conectar a internet, mandar la información a un servicio en la nube.

Se busca obtener datos que  ayuden a predecir cómo se están comportando los valores de temperatura y humedad al interior de la colmena para ayudar a tomar decisiones antes de que sea demasiado tarde. 

En una reunión con miembros de la Unión Ganadera Regional y con apicultores, planteando las problemáticas se les habló del prototipo de la aplicación para realizar el monitoreo, se dió retroalimentación, se discutió sobre las colmenas de abejas para ver dónde se pueden colocar los sensores, y una vez instalados, llevar una o más colmenas y poblarlas de abejas para comenzar la captura de datos.

Las abejas se pueden ver afectadas por la electrónica de los sensores, y son celosas de materiales externos a la colmena. Parte de la misma investigación es identificar qué materiales serían los más adecuados. Casi no ha habido cambios en los materiales de las colmenas en los más de 200 años desde que se inventó el tipo de colmena que utilizan actualmente la mayoría de los apicultores, donde se utiliza la madera. Se tienen referencias de investigaciones y desarrollo de sistemas en Europa, Israel y  Estados Unidos; sin embargo en algunos casos aún están en desarrollo, o son muy costosos.

Se está avanzando y lo que hay está en fase de experimentación. Las abejas sólo pueden vivir en cierto margen de temperaturas, los esfuerzos para mantener dichas temperaturas al interior de la colmena las desgasta. Diseñar mecanismos que ayuden a las abejas a mantener una temperatura adecuadam así como un buen flujo de aire podría serles muy beneficioso, y ayudar a mejorar la polinización y la producción de miel. “Lo ideal son alrededor de los 34 grados celsius de temperatura para que estén agusto las abejas, por lo que las temperaturas extremas les afectan”.