Recomiendan establecer límites y postura de autoridad ante menores

El berrinche de un niño o adolescente puede llegar a la confrontación física con sus padres e incluso a la autolesión, debido a una alta impulsividad y baja tolerancia a la frustración.
 
El especialista en sicología, Leonardo Aguirre Gallardo, explicó que se trata de una crisis conductual que puede tener varios niveles que se generan de forma paulatina y en algunos casos al estallar en berrinche se presentan reacciones impulsivas como lanzar cosas, destruir objetos o atentar contra su integridad física.

Detalló que al inicio puede ser que las explosiones o los berrinches que duraban cinco minutos llorando, después aumentaron a 15 y con gritos, decir groserías y va creciendo de manera paulatina con el paso del tiempo.

Resaltó la importancia de no pensar en qué se está haciendo bien o mal, sino centrarse en detectar las acciones como padres o figura de autoridad que pudiera dar pie a que vaya creciendo este problema conductual como ser permisivo al cumplir las reglas y en ocasiones no, así como no respetar los tiempos de uso de electrónicos.  

“Lo ideal para evitar que vaya creciendo son limites muy claros, una postura de autoridad y firme con el límite que se vaya trazando, pero nada de esto implica gritar, pegar, amenazar, nada de eso, pero también con un trato que sea amable y cordial y sobre todo dándole una corta y clara explicación de qué es lo que está pasando”, expuso.

El especialista en sicología comentó que hay menores que requieren ser valorados para conocer un diagnóstico, pues hay padecimientos que van provocando poca tolerancia a la frustración como particularidad neurobiológica que se requiere trabajar en terapia y si es necesario llevar un tratamiento farmacológico. 

Asimismo, abundó, hay otros factores como el tipo de contenido que observan en televisión y videojuegos, donde hay estudios que demuestran que los menores expuestos a contenido violento lo empiezan a replicar y quienes vieron conductas más amables son amables al interactuar con otras personas.  

Subrayó la importancia de identificar cuando el niño, niña o adolescente empieza a no razonar al ponerle un límite y dice "no" o utiliza frases como "yo lo quiero" o "tú no me vas a decir", además del llanto descontrolado.

Asimismo, señaló, hacer este tipo de escenas en público y no se da cuenta que está rompiendo las reglas, son situaciones que indican que algo está pasando y se debe actuar.