Prohibición de vapeadores no disminuye su uso

*Se calcula que en México existen al menos dos millones de usuarios de estos dispositivos

Médicos, padres de familia y especialistas coincidieron en señalar que la prohibición de vapeadores no ha sido suficiente para evitar su uso, incluso en menores de edad.

Gabriela Sterling, presidenta de la organización Poder Ciudadano, señaló que se busca establecer una política pública que proteja a los jóvenes.

Por otro lado, el médico José Ignacio López apuntó que lo que se requiere es la regulación de vapeadores y no su prohibición ya que siguen adquiriéndose en el mercado negro.

En su oportunidad, Óscar Balmen, especialista en temas de delincuencia organizada refirió que actualmente el mercado negro de los vapeadores en México está controlado por el crimen organizado, que se ha dado cuenta que es un producto que tiene mucha popularidad en redes sociales y sobre todo con adolescentes.

Uso de vapeadores en menores al alza

En el marco del Día Mundial Sin Tabaco, que se conmemora cada 31 de mayo, calificaron de urgente impulsar una regulación como política pública en salud efectiva y responsable, principalmente porque son los menores de edad quienes corren con mayor riesgo y exposición a las alternativas al cigarro con este tipo de prohibiciones.

Al respecto, Patricia Ganem, vicepresidenta de la Comisión de Educación de la Coparmex, explicó que desde que se prohibieron los vapeadores se ha registrado que va al alza el consumo de estos productos entre menores de edad.

Incluso, destacó, ellos los venden de forma clandestina en todos los niveles, lo más grave es que su acceso ya alcanzó a las primarias en el país.

En ese sentido se pronunciaron por una regulación estricta y con límites claros permitiría que los vapeadores sean consumidos exclusivamente por adultos, ya sea para tratamientos de adicción a la nicotina o suministro de la misma, reduciendo riesgos y daños, lo que protegería a menores de edad y evitaría que accedan fácilmente a estos, además que una regulación beneficiaría al menos a los dos  millones de consumidores de vapeadores que existen en México.