¿Por qué es bueno dar gracias por lo vivido en el año, según la psicología?

*El cierre de año es una oportunidad única para reflexionar sobre lo que hemos experimentado

Un nuevo año que queda atrás y hay miles de momentos que recordar, hay para quienes fue un año bueno y otros para los que no lo fue tanto, sin embargo, dar gracias por lo vivido siempre es importante, según la psicología.

Aunque durante el año que se está terminando pudiste haber vivido momentos buenos, regulares, malos y muy malos, al final del día sigues aquí, listo para iniciar un nuevo año, esto es un motivo para dar gracias.

Los motivos por lo que es bueno dar gracias por lo vivido en el año, según la psicología
El cierre de año es una oportunidad única para reflexionar sobre lo que hemos experimentado. Desde logros personales hasta los desafíos superados, expresar gratitud por lo vivido puede tener un impacto profundo en nuestra salud mental y bienestar general. 

Según diversos estudios psicológicos, la gratitud no solo mejora nuestro estado emocional, sino que también fortalece nuestras relaciones y nos ayuda a afrontar mejor el futuro.
Estos son los motivos por lo que es bueno dar gracias por lo vivido en el año, según la psicología:

•    La gratitud como herramienta para el bienestar emocional

La gratitud, definida como el reconocimiento y aprecio por las cosas buenas que nos suceden, ha sido objeto de numerosos estudios en psicología positiva. 

Según el Dr. Robert Emmons, investigador líder en este campo y autor de Thanks! How the New Science of Gratitude Can Make You Happier, practicar la gratitud regularmente puede aumentar nuestra felicidad en un 25 por ciento. Además, esta práctica nos ayuda a reducir emociones negativas como la envidia o el resentimiento.

“Cuando expresamos gratitud cambiamos nuestro enfoque hacia lo positivo, lo que nos permite ver nuestras experiencias desde una perspectiva más equilibrada y optimista”, explica Emmons en su investigación.

•    Un antídoto contra el estrés y la ansiedad

Dar gracias también tiene un impacto en nuestra salud física y mental. Según un estudio publicado en el Journal of Psychosomatic Research, las personas que practican la gratitud regularmente presentan niveles más bajos de cortisol, la hormona del estrés. Esto se traduce en una mejor calidad del sueño, presión arterial más estable y una mayor sensación de calma en situaciones difíciles.

La psicóloga Barbara Fredrickson, autora de la teoría de las emociones positivas, señala que la gratitud fomenta la resiliencia, ayudándonos a recuperarnos más rápido de los contratiempos. 

“Agradecer lo vivido, incluso los desafíos, nos permite reinterpretar las experiencias y encontrarles un significado positivo”, afirma Fredrickson.

•    Fortalece las relaciones personales

Otro beneficio destacado de la gratitud es su capacidad para fortalecer los vínculos sociales. Un estudio de la Universidad de California, dirigido por el Dr. Martin Seligman, descubrió que las personas que expresan gratitud hacia sus seres queridos reportan relaciones más cercanas y satisfactorias. 

Al agradecer lo que otros han hecho por nosotros durante el año, no solo mejoramos nuestra conexión emocional con ellos, sino que también fomentamos un entorno más empático y solidario.