*Los adultos deben escuchar y observar lo que expresan los menores maltratados a través de formas verbal y no verbal
*Sus miradas, expresiones y cambios de humor comunican lo que están viviendo
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En México un 80 por ciento del maltrato infantil ocurre al interior del hogar, señaló la presidenta de la Asociación Corazón de Súper Héroe, Zulema Gaxiola Martínez de Castro.
Comentó que el menor que vive algún tipo de violencia desea ser escuchado, romper el silencio y decir lo que está sucediendo, de ahí el llamado a los adultos que están alrededor de los menores a escuchar y observar lo que expresan nuestros niños a través de formas verbal y no verbal con sus miradas, expresiones y cambios de humor.
La clave, dijo, es brindar a las y los menores factores de protección que contribuyan a prevenir la violencia y motivarles a levantar la voz.
Lo principal es fomentar la cultura del buen trato y ante la sospecha de que algún menor a nuestro cargo como docentes, médicos, pedagogos, estar entrenados para detectar y canalizarlos para que sean atendidos.
La niña o niño que es maltratado siente vergüenza, culpa, soledad y al vivir esta situación al interior de su hogar existe la sensación de no tener un lugar seguro, lo que le dificulta romper el silencio.
Cuando lo hace, recomendó a los adultos creerle, ya que es mucho más contundente un testimonio de un menor que levanta la voz y también se debe realizar una valoración física, pues el maltrato tiene muchas caras.
“Si eres un niño, niña, adolescente o joven debes levantar la voz, buscar un espacio donde puedas romper el silencio, un espacio seguro con algún adulto que te pueda escuchar, proteger, si eres un adulto y tu recibes alguna voz que ha roto el silencio y dice que está siendo maltratado ¿qué debemos hacer? Pues creerle al niño siempre”, expuso.
Es un porcentaje mínimo el que levanta la voz y hay que hacerles sentir valientes y orgullosos por atreverse hablar y brindarles un sentimiento de seguridad, aclarar que no es culpable de lo que sucede y que estamos ahí para apoyarle.
Asimismo, preguntar si desea que lo comparta con alguien más como su mamá y papá y resaltó la importancia de identificar heridas físicas y emocionales.
Lo que no se debe hacer si el menor se acerca a pedir ayuda, es dudar y juzgar, aun cuando se señale al abuelo o abuela, no pedir detalles solo escuchar lo que deseen compartir, mantener la calma y evitar el uso de términos que alarmen al menor como denuncia, policía o incluso insultos al agresor.
Asimismo, subrayó, se debe tratar el tema con discreción, no hacer promesas y estar consiente que no siempre se cuenta con la comprensión familiar.
Recordó las líneas al servicio de las familias el 911 o 089 para denuncia anónima.
Hermosillo, Sonora, México
Tel.: +52 1 662 217 3771