La pitahaya es una cactácea columnar que se encuentra en zonas áridas y semiáridas de México y Sonora es uno de los estados privilegiados al contar con ella gracias a su biodiversidad, la cual se produce de manera natural.
Con el fin de aprovechar lo que la tierra nos ofrece para la producción de alimentos en comunidades indígenas, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) se acercó a integrantes de la etnia yaqui.
Los investigadores del CIAD trabajaron con yaquis de las comunidades de Vícam, Vícam Estación y Loma de Bácum, quienes realizaron una etnografía alimentaria para conocer qué comían antes y ahora, además de dónde obtenían la materia prima para elaborar los alimentos.
Mayra de la Torre, investigadora del CIAD, explicó que hombres y mujeres se dieron a la tarea de dialogar con los ancianos para recuperar sus recetas tradicionales y entre distintos alimentos surgió el dulce de pitahaya.
Pitahayeros compiten con los pájaros por el fruto
La corta temporada en la que este fruto silvestre se cosecha es de mayo a julio; su sabor dulce se debe al punto de maduración.
De la Torre explicó que, por la mañana, antes de que salga el sol, mujeres yaquis van al cerro para bajar las pitahayas, las cortan y les quitan la cáscara, que dejan en el monte por ser materia orgánica.
Mencionó, que es una competencia diaria con las aves que se alimentan de este fruto.
Receta tradicional
La pitahaya se procesa de inmediato para evitar que se amargue; llevan un garrafón con agua purificada y en el mismo monte, machacan el fruto y lo ponen en remojo.
Con la rama de una planta con espinas limpian la pulpa para quitarle la mayor parte de la semilla, después se concentra, se empaca en frascos estériles y se espera a que haga vacío.
La investigadora del CIAD explicó que este dulce de pitahaya es la pulpa concentrada y así acostumbran consumirlo, “para nosotros sería como una mermelada, pero a la que no se le añade conservador o azúcar, no necesita nada”.
Impulsan proyecto productivo
Con asesoría del CIAD, un grupo de mujeres de la comunidad indígena yaqui conforman la agrupación “Aaki Nawa”, que significa raíz de pitahaya y se dedican a la elaboración de productos artesanales como el dulce de pitahaya, pinole de maíz y trigo, harina de péchita y uvalama en almíbar para su venta.
Según estudios realizados por el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo los productos alimenticios que realizan las mujeres yaquis cumplen con las normas de calidad e inocuidad establecidas y están en condiciones para buscar su exportación a otros países.
Propiedades antioxidantes
La pitahaya es rica en antioxidantes que se le atribuye principalmente a la presencia de betalaínas, por lo que el consumo del fruto es una alternativa para retardar o prevenir la oxidación de moléculas.
Asimismo, su consumo favorece la digestión, ya que cada cien gramos contienen 3.11 gramos de fibra dietaria.
La semilla de la pitahaya es rica en aceites, especialmente en Omega 3, esencial para un adecuado desarrollo y funcionamiento del cerebro y sistema nervioso.
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Nini:
09-06-2024 12:17
Ahora quiero comer pitahayas 😋
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Hermosillo, Sonora, México
Tel.: +52 1 662 217 3771
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