Los famosos “factureros”

Cuentas claras, amistades largas

Bienvenido una vez más a su gustada sección Cuentas claras, amistades largas. Si es la primera vez que me lees y no tienes idea de que está pasando aquí déjame ponerte en sintonía. Esta es una columna en la que cada semana tenemos una charla entre amigos acerca de impuestos, finanzas, créditos y otros temas de relevancia económica, siempre explicados de una manera fácil y digerible. Te invito a leer mis artículos anteriores para ir avanzando todos juntos.

Hoy toca platicar sobre un tema que ha sido muy controversial y popular a la vez, ya que todos hemos escuchado sobre las empresas que compran y venden facturas, pero no las facturas normales que tú y yo podemos pedir en cualquier tienda, estamos hablando de los famosísimos ‘’factureros’’. Acompáñame a ver en que consiste esta actividad, sus beneficios, riesgos y todo lo que tenga que ver con el ahora llamado, nuevo deporte nacional.

¡Empecemos!
Hace tres semanas hablábamos de la importancia de las facturas, el por qué necesito hacerlo y cómo hacerlo, te dejo el link de ese artículo:

También te puede interesar: ¿Porqué necesito facturar y cómo hacerlo?. 

Si de plano te da flojera abrirlo aquí te lo sintetizo. La factura es el qué, quién, cómo, cuándo, dónde y por qué de una actividad comercial entre cliente y empresa, es el papel que comprueba que existió dicha transacción. 

Tú como cliente, al momento de comprar un artículo, por lo general, estás pagando una cantidad de impuestos, mismos que posteriormente puedes deducir. 

Está obligado a presentar su declaración de impuestos, en pocas palabras, todo aquél que lleve a cabo actividades por las que reciba ingresos y esté dado de alta en el Servicio de Administración Tributaria, ya sea que tengas tu propia empresa, tengas un restaurante, seas contador independiente, rentes un edificio, etc. 

Entonces, tú al momento de vender un producto o servicio estás cobrando un porcentaje de impuestos, los cuales son los que debes incluir en tu declaración y pagarlos, pero, el SAT te da la oportunidad de que de esos impuestos cobrados puedas deducir o restar los impuestos de los productos o servicios exclusivamente indispensables para realizar tus actividades que compraste. 

Hasta aquí puedo ver tu cara con signo de interrogación, así que veamos un ejemplo:

Supongamos que yo tengo mi propia empresa, Porchas S.A. de C.V. y vendo muebles y artículos de oficina, llega un cliente y me compra una silla por $200.00, el IVA (16%) de esa silla sería $32.00, los cuales debo notificarle al SAT, pero también yo como empresa tengo mis gastos, así que voy al Costco y compro productos de limpieza y pago $100.00, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de esos productos serían $16.00.

Así que al final del mes voy a entrar a la página del SAT y le voy a decir: Mira SAT, este mes vendí $200.00, así que te debo $32.00 de IVA……PERO también tuve gastos por $100.00, así que a esos $32.00 le vas a restar $16.00, así que solamente te voy a pagar $16.00 de IVA.

Una vez que ya tenemos entendido ese punto, ahora te pregunto ¿Ya tienes una idea de por qué las empresas compran facturas? Si todavía no te queda claro,

¡Chale!, sigamos platicando.

Ahora, supongamos que una empresa ganó millones y millones de pesos en el mes, eso quiere decir que va a pagar miles y miles de pesos en impuestos, entonces en un acto desesperado por no pagar tantos impuestos…..¡aaaaaaaaaahhh! ya entendí. 

¿Cuáles son los beneficios de comprar facturas?
Ahora digamos que mi empresa Porchas S.A. de C.V. quiere deducir $100,000.00 y no tengo manera de comprobarlos, entonces busco una empresa que venda facturas, (Si alguien del SAT me está leyendo te juro que es broma) le deposito $100,000.00, ellos me entregan la factura, me cobran el 8% o 10% dependiendo de la cuota, y me regresan ‘’por debajo del agua’’ el restante que serían $92,000.00. 

O sea, yo transferí $100,000.00, me entregaron mi factura por $100,000.00, me cobraron el 8%, me regresaron en efectivo $92,000.00 y de esos $100,000.00 facturados puedo deducir el IVA por $16,000.00.

¿Y cómo le hacen las factureras para no meterse en problemas?
Aquí es donde debemos poner atención.
Queda claro que la gran mayoría, si no es que todas las empresas que venden las facturas son fantasma y lo que hacen es buscar gente a la que ofrecen $10,000.00 u otra cantidad para que le den su credencial de elector y su firma, con lo que se convierten en representantes legales de la dichosa empresa.

Los factureros venden las facturas a nombre de la empresa creada y se vuelven millonarios, mientras que las personas a las que ofrecieron dinero por su identidad se pueden meter en el problema de su vida y ellas ni en cuenta. 

Y esto es muy común, van a buscar a personas en situación de calle, en las orillas de la ciudad o hasta sus mismos empleados a los que les suben el sueldo o les dan una remuneración a cambio de su identidad y hacen billetes a lo loco. 

La autoridad no se tienta el corazón, al momento de identificar una empresa con estas características se van sobre los representantes legales, aquí no hay piedad para perdonar a las personas por no saber sobre las actividades de la empresa y ‘’papelito habla”. En tanto, los verdaderos criminales se hacen millonarios, nada es comprobable, y toda la responsabilidad cae en contra de esa persona que le ofrecieron diez mil pesos.

Si he comprado este tipo de facturas ¿corro peligro?

Déjame decirte que sí, gracias a la nueva reforma fiscal penal que entrará en vigor el próximo 2020 tanto las empresas que venden facturas, como las personas que compren facturas van a estar más perseguidos que el correcaminos por el coyote.

Hace tiempo platicamos también sobre la reforma fiscal 2020, te comparto el link para que lo leas:

También te puede interesar: Reforma Fiscal 2020 ¡Sálvese quien pueda!

Se viene una cacería de brujas, esperemos que al final del día los verdaderos criminales sean los que paguen por sus actos y no gente inocente que se vendió por no tener otra opción para sobrevivir. 

Espero que esta información te haya ayudado para aclarar dudas y ampliar tu conocimiento sobre estos temas. Aquí lo importante es que aprendas y no dudes en sugerir algún tema o dejar un comentario.

Además, es necesario que tengas siempre presente que en este mundo solo hay dos cosas seguras: la muerte y pagar impuestos.